Los organizadores del Campeonato del Mundo de automovilismo Fórmula 1 volvieron a recurrir a su plataforma comunicacional en redes sociales a fin de recordar al 7 veces Campeón de la especialidad, Michael Schumacher, en vista que este fin de semana se cumplen 6 años de su última participación en el 'Gran Premio de Mónaco'.
Schumacher ha sido uno de los pilotos más exitosos en Mónaco, al lograr ganar la prueba en 5 ocasiones, desde que lo hizo por vez primera en 1994 con un Benetton Ford. Ello le coloca segundo en la lista de pilotos que más veces ganaron la clásica empatado con el británico Graham Hill y solo detrás de Ayrton Senna, que la ganó 6 veces.
Un recordatorio en forma de una producción audiovisual de 60” describe como la última hazaña de Schumacher en Mónaco el modo en que terminó la edición del 2010. Allí el alemán se encontraba en posiciones secundarias con un auto Mercedes Benz GP, pero un choque entre dos autos a falta de pocas vueltas para terminar la prueba ocasionó la salida del Safety Car, que neutralizó las acciones hasta que entró al box en la última curva, momento en el cual Schumacher sorprendió con gran habilidad a Fernando Alonso arrebatándole la sexta plaza.
La alta política del deporte - muy interesada en ayudar en todos los modos posibles a Alonso a ganar el título para Ferrari en vista de los enormes intereses comerciales y mediáticos en juego - pronto encontró un tecnicismo reglamentario lo suficientemente consistente como para sancionar al alemán y borrar la vergüenza que le hizo pasar a Alonso.
El audiovisual divulgado por la plataforma de la Fórmula 1 en redes sociales muestra claramente como en esa última curva Alonso, con su tradicional capacidad al volante, tomó la curva por donde mejor le pareció en vez de respetar la línea de carrera. El español en consecuencia perdió agarre y Schumacher le ganó la posición simplemente por trazar la curva correctamente.
En su momento, los federativos alegaron que Schumacher superó a Alonso antes de cruzar la línea blanca en torno a la entrada en boxes que en esos años era contemplada por el Reglamento Deportivo en los protocolos con Safety Car en pista. Sin embargo, de haber intentado Schumacher respetar la posición de Alonso luego de la tonta maniobra de éste, habría tenido que frenar en unas condiciones en las que su carro habría sido golpeado por quienes venían detrás, que identifican ese punto de la pista como de aceleración y no de frenada.
La sanción ese día impidió a Schumacher adjudicarse los puntos de la sexta posición, pero ahora la propia franquicia de la F-1 hace justicia al recordar la maniobra, describiéndola como la “última genialidad de Schumacher en Mónaco”.
La última presentación del 'káiser' en Mónaco, en el 2012, fue menos auspiciosa. Allí fue golpeado en la propia largada por el auto de Romain Grosjean, quien no pudo evitar al alemán que venía por su lado izquierdo luego que, del lado derecho, otro piloto tuvo la zafia ocurrencia de intentar apartar al francés con un volantazo en un lugar tan poco propicio como la curva de Sainte Devote. Schumacher acabó siendo la víctima inocente de una carrera en la cual habría podido aspirar al podio y la prensa acusó - como es natural - al más novato de los tres. Pero el talentosísimo volantazo fue cortesía del mismo hombre cuya capacidad ha dado forma a los resultados que un equipo del nivel de McLaren suma desde 2015.
Schumacher, tras participar en Mónaco por última vez en mayo del 2012, completó esa campaña para Mercedes-Benz GP y se retiró del deporte, sufriendo un grave accidente de esquí en el 2013 que le mantiene postrado y apartado del mundo, que todavía le echa de menos y recuerda sus hazañas.
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